Jugando con mis lagrimas

La creación de un monstruo, el pecado se posó en carne, manipulación de sus sentidos, distorsión, diversión, la tentación es su perdición, iniciación de sus más grandes errores, pieles frágiles, suaves, dulces y tiernas, somos su todo y su nada, llevo una cruz en mi cuello por toda esa gente buena que se cruza y se cruzará en mi camino y no me pidan mas que eso pues no hay, venganza quizás, no lose o tal vez odio reprimido da lo mismo de todas maneras disfrutare de sus miserables almas con cada una de mis travesuras, una declaración de guerra a toda esa testosterona podrida y agusanada que alimenta lo mas oscuro de mi alma, a veces es preferible decir que no ya que una vez que dices si tu vida puede volverse un infierno y se escapa de las manos sin control alguno, jugare sus juegos y seré inocente y libre de pecado y disfrutare con su brutalidad y su deseo de poseer lo inalcanzable para sus mentes enfermas y morbosas, el deseo, su deseo, será su final y mi principio. Mi mundo mi pequeño y amado mundo como explicar lo que se siente sin sentirme mas culpable de lo que me siento, quiero que mueran mis sentidos para no sentir esto que intento negar y que al tomarme me hace pedazos lo que me queda de alma, tan mundanos, tan básicos, tan vacíos y yo tan llena de colores y sabores para con mi mundo, tantas maneras de hacer amor que no comprendo como estos seres pueden hacer y producir tanto dolor sin sentir nada, siento tanta pena al saber que en lo que resta de vida seguiré topándome con estos seres tan básicos y que marcaron tanto mi vida con sus asquerosas almas, libre albedrío, quisiera despedirme para siempre de ciertos seres y deseo con todo mi ser que cierta despedida sea un “¡cuanto tiempo sin vernos!”.